Verguenza

Argentina ha sido cuna de varios intelectuales y artistas que han trascendido sus fronteras para llegar a ser reconocidos internacionalmente y posicionar a nuestro querido país en el mundo.

Entre muchos otros se pueden mencionar a Jorge Luis Borges, Carlos Gardel, Bernardo Houssay, Piazzola, Sábato, Favaloro, Mercedes Sosa, Quino, Fontanarrosa, etc, etc.

Todos ellos han contribuido de una manera u otra a las artes, a las ciencias, al deporte o a la cultura en general, y han enriquecido nuestra historia y nuestra imagen en el exterior.

Hoy abrí un periódico local de Calgary y me llamó la atención el ver "Argentina" en uno de sus titulares. Pero la sorpresa se convirtió en verguenza y tristeza casi inmediatamente, ya que la nota se refería a este señor que ayer dijo estas palabras sobre la gente y los periodistas que lo critican:

"...que la chupen, que la sigan chupando."

Como si no tuvieramos suficiente con los gobernantes que nos mal-representan, Maradona nos da una lección sobre mal gusto, soberbia y falta de profesionalismo y respeto. Indiscutible como jugador, horrible como ejemplo de persona y peor aún como representante de una de las poquísimas cosas en las que todavía podemos decir que tenemos alguna relevancia: el Seleccionado Mayor de Futbol. Debería como mínimo pedir disculpas públicas, especialmente a los argentinos, o por lo menos a los que no nos sentimos identificados con este tipo de comportamiento. Pero como bien expresa el dicho: no se le pueden pedir peras al Olmo.