Discriminación e Intolerancia

El viernes se suscitó una situación muy desagradable en este Blog, vía la cajita que tenía en la barra lateral (y que he decidido remover por esa razón). Antes de que salte alguno y me diga que estoy censurando la libre opinión y discusión de las ideas, permitan que me explique un poco más. Una lectora del Blog, medio en broma, medio en serio, realizó una generalización poco feliz de los argentinos, basada en el comportamiento de una persona de esa nacionalidad en particular. En seguida, como era de esperarse, algunos dejaron un mensaje expresando su enojo. A pesar de que intenté suavizar las cosas haciendo notar de que, si bien la lectora había estado mal, no había tenido la intencion de ofender, la cosa siguió, disculpándose a medias la ofensora, aceptándolo a medias los ofendidos. Uno hasta me dijo que como dejaba decir algo asi en mi blog siendo yo mismo argentino.
Y siendo este justamente mi blog, les voy a decir lo que pienso. Es triste que hoy en día, los latinos sigamos teniendo prejuicios unos hacia otros, o que generalicemos a la gente por nuestros preconceptos hacia un país, sea cual sea. La lectora que hizo el comentario indudablemente estuvo mal, y si bien creo que no lo hizo con mala intención, debería haber pensado dos veces que lo que escribía podía ofender. A los que se ofendieron los entiendo, a nadie le gusta que lo cataloguen en base a prejuicios. Pero también creo que somos poco tolerantes, siempre se necesitan dos partes para iniciar una guerra. Si bien como argentino a mi el comentario no me gusto, traté de ver primero su intencionalidad; y de recordar que muchos ciudadanos de mi país discriminan a gente de países limítrofes todos los días en forma muy agresiva, no somos ejemplo de nada, y menos que menos de humildad. Una cosa no justifica a la otra, que quede claro.
Tengo la impresión de que, a pesar de que pregonamos la hermandad entre latinos, y nos unimos en empresas tales como inmigración, etc, estamos muy lejos de lograr una unidad basada en nuestras raíces comunes. A la primera de cambio mostramos la hilacha.
El lunes justamente iba a publicar una nota bastante simpática sobre la manera de hablar de nosotros los argentinos, pero viendo el nivel de intolerancia reinante lo voy a suspender hasta el miércoles; y lo peor es que al menos por ahora, me veo obligado a habilitar la moderación de comentarios, cosa que aborrezco, pero que me parece necesaria; cualquier opinión con el mas leve tinte discriminatorio o intolerante no será publicada, lamento si esta decisión le quita espontaneidad o fluidez a la conversación.
Gracias.